Esta novena
la rezamos por nuestros difuntos o almas del Purgatorio, para que nuestras
oraciones y sufragios de buenas obras les aprovechen y lleguen pronto a unirse
con Dios en el cielo.
Rezar la oración del día que corresponda y terminar con la oración final y
el responso:
Oración Final y Responso
Oh María, Madre de misericordia: acuérdate de los hijos que tienes en el
purgatorio y, presentando nuestros sufragios y tus méritos a tu Hijo,
intercede para que les perdone sus deudas y los saque de aquellas tinieblas
a la admirable luz de su gloria, donde gocen de tu vista dulcísima y de la
de tu Hijo bendito.
Oh glorioso Patriarca San José, intercede juntamente con tu Esposa ante tu
Hijo por las almas del purgatorio.
V. No tomes en cuenta, Señor, mis pecados.
R. Cuando me llames a tu presencia.
V. Acuérdate que me hiciste a Tu Imágen.
R. Cuando me llames a tu presencia.
V. No te olvides que tu Hijo me redimió con su Sangre.
R. Cuando me llames a tu presencia.
Padrenuestro.
V. Señor, oye mi oración.
R. Y llegue a ti mi clamor.
Oremos. Oh Dios mío, de quien es propio compadecerse y perdonar: te rogamos
suplicantes por las almas de tus siervos que has mandado emigrar de este
mundo, para que no las dejes en el purgatorio, sino que mandes que tus
santos ángeles las tomen y las lleven a la patria del paraíso, para que,
pues esperaron y creyeron en ti, no padezcan las penas del purgatorio, sino
que posean los gozos eternos. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
V. Dales, Señor, el descanso eterno.
R. Y luzca para ellos la luz perpetua.
V. Descansen en paz.
R. Amén.
DÍA PRIMERO
Por la señal,etc.
¡Señor mío, Jesucristo!, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor
mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas
las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque
podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina
gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la
penitencia que me fuere impuesta. Amen.
Señor mío Jesucristo, que quieres que tengamos suma delicadeza de
conciencia y santidad perfecta: te rogamos nos la concedas a nosotros; y a
los que por no haberla tenido se están purificando en el purgatorio, te
dignes aplicar nuestros sufragios y llevarlos pronto de aquellas penas al
cielo. Te lo pedimos por la intercesión de tu Madre purísima y de San José. Amén
Terminar con la oración final y el responso
DÍA SEGUNDO
Por la señal, etc.
¡Señor mío, Jesucristo!, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amen.
Señor mío Jesucristo, que eres cabeza de todos tus fieles cristianos que en
ti nos unimos como miembros de un mismo cuerpo que es la Iglesia: te
suplicamos nos unas más y más contigo y que nuestras oraciones y sufragios
de buenas obras aprovechen a las ánimas de nuestros hermanos del
purgatorio, para que lleguen pronto a unirse a sus hermanos del cielo. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Terminar con la oración final y el responso
DÍA TERCERO
Por la señal, etc.
¡Señor mío, Jesucristo!, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amen.
Señor mío Jesucristo, que a los que pecan castigas con justicia en esta
vida o en la otra: concédenos la gracia de nunca pecar y ten misericordia
de los que, habiendo pecado, no pudieron, por falta de tiempo, o no
quisieron, por falta de voluntad y por amor del regalo, satisfacer en esta
vida y están padeciendo ahora sus penas en el purgatorio; y a ellos y a
todos llévalos pronto a su descanso. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Terminar con la oración final y el responso
DÍA CUARTO
Por la señal, etc.
¡Señor mío, Jesucristo!, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amen.
Señor mío Jesucristo, que exiges la penitencia aun de los pecados veniales
en este mundo o en el otro: danos temor santo de los pecados veniales y en
misericordia de los que, por haberlos cometido, están ahora purificándose
en el purgatorio y líbralos a ellos y a todos los pecadores de sus penas,
llevándoles a la gloria eterna. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Terminar con la oración final y el responso
DÍA QUINTO
Por la señal, etc.
¡Señor mío, Jesucristo!, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amen.
Señor mío Jesucristo, que a los regalados en esta vida, que no pagaron por
su culpa o no tuvieron bastante caridad con el pobre, castigas en la otra
con la penitencia que aquí no hicieron: concédenos las virtudes de la
mortificación y de la caridad y acepta misericordioso nuestra caridad y
sufragios, para que por ellos lleguen pronto a su descanso eterno. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Terminar con la oración final y el responso
DÍA SEXTO
Por la señal, etc.
¡Señor mío, Jesucristo!, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amen.
Señor mío Jesucristo, que quisiste que honrásemos a nuestros padres y parientes
y distinguiésemos a nuestros amigos: te rogamos por todas las ánimas del
purgatorio, pero especialmente por los padres, parientes y amigos de
cuantos hacemos está novena, para que logren el descanso eterno. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Terminar con la oración final y el responso
DÍA SÉPTIMO
Por la señal, etc.
¡Señor mío, Jesucristo!, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amen.
Señor mío Jesucristo, que a los que no se preparan a tiempo para la muerte,
recibiendo bien los últimos sacramentos y purificándose de los residuos de
la mala vida pasada, los purificas en el purgatorio con terribles
tormentos: te suplicamos, Señor, por los que murieron sin prepararse y por
todos los demás, rogándote que les concedas a todos ellos la gloria y a
nosotros recibir bien los últimos sacramentos. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Terminar con la oración final y el responso
DÍA OCTAVO
Por la señal, etc.
¡Señor mío, Jesucristo!, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amen.
Señor mío Jesucristo, que a los que vivieron en este mundo demasiado
aficionados a los bienes terrenales y olvidados de la gloria, los retienes
apartados del premio, para que se purifiquen de su negligencia en desearlo:
calma, Señor misericordioso, sus ansias y colma sus deseos, para que gocen
pronto de tu presencia, y a nosotros concédenos amar de tal manera los
bienes celestiales, que no deseemos desordenadamente los terrenos. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Terminar con la oración final y el responso
DÍA NOVENO
Por la señal, etc.
¡Señor mío, Jesucristo!, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amen.
Señor mío Jesucristo, cuyos méritos son infinitos y cuya bondad es inmensa:
mira propicio a tus hijos que gimen en el purgatorio anhelando la hora de
ver tu faz, de recibir tu abrazo, de descansar a tu lado y; mirándolos,
compadécete de sus penas y perdona lo que les falta para pagar por sus
culpas. Nosotros te ofrecemos nuestras obras y sufragios, los de tus Santos
y Santas; los de tu Madre y tus méritos; haz que pronto salgan de su cárcel
y reciban de tus manos su libertad y la gloria eterna. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Terminar con la oración final y el responso
Confeccionó Franja
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